¿Nuevo nombre para un viejo problema?
Las llamadas fraudulentas son una forma de fraude cuyo objetivo es conseguir tu información personal, como contraseñas, datos de cuentas bancarias y otro material confidencial que no quieres que caiga en malas manos. Las llamadas fraudulentas se conocen como vishing.
El término vishing es una combinación de las palabras voz y phishing. El phishing es un método muy utilizado por los ciberdelincuentes para robar la información personal de sus víctimas o para infectar sus dispositivos con programas maliciosos, como troyanos. Los correos electrónicos son la forma principal de los ataques de phishing, pero los estafadores y ciberdelincuentes utilizan las llamadas telefónicas para el vishing. La estafa no tiene que producirse necesariamente en Internet, sino que incluso tu viejo teléfono fijo es un canal potencial a través del cual los delincuentes pueden amenazar tu ciberseguridad. De hecho, es un nuevo nombre para un viejo problema: las estafas telefónicas, que utilizan métodos cada vez más sofisticados para engañar al objetivo.
Cómo utilizan los estafadores la tecnología para engañar
Identificar una estafa de phishing puede ser complicado. Por un lado, no siempre puedes saber si una llamada es una estafa con sólo mirar el número. Utilizando tecnologías como VoiP (Voice over Internet Protocol) e IVR (Interactive Voice Response), los estafadores pueden dirigirse fácilmente a muchas víctimas de todo el mundo. Otro método habitual utilizado por los ciberdelincuentes es utilizar identidades falsas para engañar a sus víctimas y hacerles revelar información confidencial. Si la víctima cree que está hablando con alguien en quien confía, es más probable que acceda y haga lo que le pide la persona que llama.
Cómo obtienen tu número de teléfono los ciberdelincuentes
Una forma en que los estafadores pueden hacerse con los números de teléfono de las víctimas es buscando números en los datos filtrados en las filtraciones de datos. Los estafadores también pueden utilizar ataques de phishing para engañar a las víctimas y hacerles dar sus números de teléfono. Si alguien está dispuesto a dar su número de teléfono fácilmente, es un buen indicio de que también puede ser vulnerable a un ataque de phishing.
Si te preocupa ser blanco de estafadores online por teléfono, puedes hacer que tu número de teléfono sea privado. También puedes minimizar el riesgo de ser víctima de un ataque de phishing teniendo cuidado de dónde das tu número de teléfono. Limitando la información a la que pueden acceder distintas aplicaciones móviles, como tu agenda de contactos, puedes evitar que los números de otras personas caigan en manos equivocadas.
Objetivos del vishing: particulares y empresas
Tanto si eres un particular como una gran organización, ambos son objetivos atractivos para las estafas de vishing. Los ciberdelincuentes intentan robar información de empresas y negocios a través de empleados de distintos niveles. Por ejemplo, un estafador puede ponerse en contacto contigo diciendo ser tu jefe y pedirte que pagues una factura o descargues un software. Por desgracia, muchas víctimas desprevenidas hacen lo que les dice su «jefe».
La creciente sofisticación de los ataques vishing
A medida que avanza la tecnología y entran en juego la inteligencia artificial y los métodos de aprendizaje automático, las estafas telefónicas son aún más difíciles de detectar. Aunque se trata de una vieja forma de intentar engañar a la gente con llamadas telefónicas, los estafadores actuales disponen de un vasto arsenal de métodos diferentes y cada vez más sofisticados para engañar a las víctimas y hacerlas caer en estas estafas.
